NI RAZONES,
NI MOTIVOS
En ti mi vida puedo confiar
más allá de riquezas y esplendor,
porque por encima de todo
siempre está nuestro amor.
Tú te apoderaste de mi alma
y me enfermaste con una ilusión,
que se agranda al mirar tus ojos
y ver cómo nace la pasión.
Al sentir las caricias de tus manos
siento tu cariño estremeciéndome,
al ahogarme en el rojo de tus labios
siento tu fuego quemándome.
Al estar juntos el tiempo vuela
y también vuelan nuestros corazones,
van a bailar juntos en un cielo de estrellas
con notas que salen de las emociones.
No hay razones ni motivos
para una relación tan avasallante,
que se desborda por la piel al tocarnos
hasta el punto de quedar inconscientes.
Tengo el honor de ser el único
que llena tu alma de alegría,
y tú eres la única persona
que da significado a mi vida.
Yo te necesito mi ángel
para no caer en el olvido,
para mi corazón que no descansa
si no es al estar contigo.
No necesitamos más razones
ni motivo para existir,
la vida real nos queda chica
hoy amándonos podríamos morir.
Pensar que el tiempo y el destino
se creen los dueños de la eternidad,
pero no tienen ni un poco
de nuestra eterna felicidad.
